06 Jun Las oportunidades para la sustentabilidad en las regiones mineras
¿Cuánto se ha podido avanzar en sustentabilidad en las ciudades y regiones mineras? ¿Se ha reflejado en este aspecto la fuerte inyección de recursos proveniente del cobre? Gran parte de la actividad en estas zonas está directamente relacionada con los ingresos de la minería, lo que ha generado aumentos, por ejemplo, en la demanda de vivienda, de oficinas y de sitios industriales.
El coloquio –organizado por el Centro de Desarrollo Urbano Sustentable (CEDEUS) y coordinado por José Piga, investigador del cluster Entorno Construido– “Ciudades mineras, ¿sustentabilidad condicionada?: avances y perspectivas”, realizado el miércoles 4 de junio, en el Salón Sergio Larraín del Campus Lo Contador UC, fue una oportunidad para la discusión sobre los efectos urbanos de la variabilidad en los precios de los recursos naturales, en ciudades de gran especialización productiva, de cara a procesos dirigidos a generar mayor sustentabilidad.
Como introducción, el director del CEDEUS, Jonathan Barton, explicó que, a su modo de ver en Antofagasta el ingreso no se ve en la calidad urbana. “Sospecho que no hay reflejo de los ingresos en el desarrollo urbano y en la planificación”, expresó.
Entre los panelistas, estuvo Patricio Meller, del Departamento de Ingeniería Industrial, de la Universidad de Chile, quien expuso sobreel “Impacto del cobre en Chile y en las regiones mineras”. En su ponencia explicó que existe una paradoja en cuanto a lo que la minería le entrega a las regiones mineras: mejores índices económicos, pero peores índices sociales que en el resto del país. “El objetivo ideal es que las comunas mineras debieran tener un mayor atractivo que Santiago. La minería no puede operar sin oír a las comunidades. Hay que invertir en el largo plazo, en el bienestar, en el medioambiente, para la comunidad. El tema central es cómo aumentar la calidad de vida en las ciudades mineras. Si hay empresas mineras tan grandes, que resuelvan ellas los problemas de sus habitantes. Tiene que haber un Estado ausente”, afirmó.
Antonio Daher, investigador del cluster Planificación Integrada, presentó su charla “Ciudades mineras: crecimiento en crisis o crisis de crecimiento”. En ella, comparó la ciudad de Coquimbo con otras regiones del país cuyo principal ingreso proviene del cobre, como Antofagasta y Atacama, como con otros enclaves productivos, como la Metropolitana, Valparaíso y Biobío. “Coquimbo es la región con mayor crecimiento económico de Chile en 40 años, sin inversión extranjera y sin grandes empresas estatales (como Codelco). Además, tiene una creciente participación regional en la oferta de empleos diversificados: primarios, pero sobre todo secundarios y más aún terciarios. Por eso mismo, su crecimiento demográfico es mayor al del país, al de Antofagasta, y al de Copiapó – Tierra Amarilla. Sin embargo, pese a que el nivel de indigencia es bajo, aún existe un alto índice de pobreza. Y ese es el gran desafío pendiente”, concluyó.
Los desafíos de Copiapó
Para aportar una mirada regional a la discusión, también participaron Francisco Escobar y Gabriela Jerónimo, representantes de la Unidad de Gestión y Proyectos Estratégicos de la Secretaría Comunal de Planificación de la Municipalidad de Copiapó. Ellos detallaron que, para la comuna, el gran beneficio de la minería es a nivel de índices de ocupación. Sin embargo, es este mismo sector el que condiciona las posibilidades de desarrollo urbano sustentable, debido a la creciente demanda hídrica y a la poca disponibilidad del recurso. “Va a haber para el 2050 una lucha entre la minería y la agricultura por los derechos de agua, según ha proyectado la Dirección General de Aguas”, señaló Escobar. Lo mismo ocurre en términos de demanda energética.
“Los impactos del auge minero son varios: la degradación y deterioro ambiental, la urbanización en el suelo agrícola, la escasez de vivienda social y el hacinamiento, la falta de mano de obra calificada y la pérdida de identidad”, expresó Gabriela Jerónimo.
A eso, indicaron, se suma el deterioro del sistema social urbano, expresado en una percepción de que no hay relación entre las cifras del boom minero con el aporte regional a las rentas generales de la nación: los habitantes no participan de las utilidades generadas por el sector. Además, consignaron que hay un déficit acumulativo de bienes públicos, especulación en el valor del suelo y relativización del riesgo.
Frente a este escenario, los ponentes propusieron lo siguiente: “El gobierno comunal deberá asumir una conducción dinámica, creativa, movilizadora, convocante y de permanente innovación hacia el cumplimiento de su nuevo rol urbano”.
Un nuevo plan para Antofagasta
El investigador del CEDEUS, Christian Matus, presentó “Escenarios para Antofagasta en la relación público-privada, participación y ciudadanía”, una exposición que tuvo por objetivo mostrar el Plan CREO Antofagasta, una iniciativa público-privada que pretende mejorar la calidad de vida en la primera metrópoli del norte chileno.
Matus detalló los objetivos estratégicos del proyecto a realizarse de aquí a 2035: Mejorar la calidad de vida y del entorno físico-ambiental; Diversificar la base económica; Atraer y retener población; Armonizar funciones productivas/portuarias con urbanas; Proveer de servicios urbanos de calidad mundial; Apoyar gestión urbana de excelencia; Promover una ciudad integrada; Impulsar una estrategia de desarrollo sostenible.
Una de las oportunidades y desafíos que propone el plan es potenciar la sustentabilidad urbana desde la estrategia de la participación integral. Esto se traduce en invertir en capital social y superar desconfianza en lo público; superar la brecha en relación a liderazgos ciudadanos y potenciar el compromiso cívico con proyectos e iniciativas de corto, mediano y largo plazo.
En los siguientes links es posible descargar las publicaciones:
ANTONIO DAHER
FRANCISCO ESCOBAR Y GABRIELA JERONIMO
PATRICIO MELLER
JOSE PIGA