05 May La planificación urbana como oportunidad: ¿Cómo enfrentar los desastres?
Las ciudades de Chile concentran la población nacional y poseen infraestructura crítica y servicios básicos que pueden verse impactados por eventos extremos tales como el aluvión ocurrido recientemente en el norte del país.
Durante este año CEDEUS albergará una serie de “debates en planificación integrada”. El primero se realizó el pasado jueves 30 de abril, ocasión en la que se discutió cómo abordar el problema de la ocurrencia de eventos climáticos extremos de una manera adecuada, desde el punto de vista de la gobernanza y planificación en general, y desde la perspectiva de la selección y diseño de las infraestructuras urbanas.
A partir de las exposiciones de David Avilés (CEDEUS), Pablo Osses (Instituto de Geografía UC) y Bonifacio Fernández (Departamento de Ingeniería Hidráulica y Ambiental UC) se abordaron los impactos y desafíos que los recientes aluviones en el norte de Chile plantean a la planificación y gestión de desastres.
David Avilés, coordinador territorial del Hub-Norte del CEDEUS, destacó la debilidad de los instrumentos de planificación territorial, cuya modificación arbitraria habría tenido incidencia en la inversión y edificación en zonas de riesgo, principalmente de población vulnerable.
Por su parte, Pablo Osses, académico de la UC, destacó la misma idea, agregando que los desbordes ocurrieron en zonas construidas que no consideraron la capacidad de carga de los cauces, mientras que en áreas no intervenidas el río no produjo daños. Además, destacó la relativamente escasa atención que se da a la mortalidad producto de los aluviones, cuya acumulación en el tiempo es similar a la que generó el tsunami de 2010, siendo su recurrencia mucho mayor a la de los maremotos.
Bonifacio Fernández –profesor emérito de la UC– estuvo a cargo del diseño hidráulico del Parque Kaukari en Copiapó. Respecto de este, resaltó que su primer tramo construido, ubicado en el lecho del río Copiapó, fue un muy buen ensayo sobre la oportunidad que presenta este tipo de proyectos para integrar el comportamiento natural de los cauces con la planificación urbana. Este parque posee 3,8 kilómetros de extensión y cuenta con seis mil metros cuadrados de jardines, una ciclovía, 76 estacionamientos para bicicletas y una fuente de agua en la que los ciudadanos se pueden bañar. El proyecto considera cuatro tramos que, cuando estén listos, harán del Parque Kaukari el más grande de la ciudad con 60 hectáreas recuperadas del lecho del río y que revertirán hasta en cuatro veces el déficit de áreas verdes de la comuna. Fernández destacó que este parque constituye un ejemplo de intervención urbana que ha servido de sitio recreativo y que ante el aluvión sirvió de medida de mitigación, ya que se estima que el comportamiento de este último evento es similar a una crecida del río que ocurriría cada 200 años
El debate
Luego de las exposiciones de los tres panelistas, se abrió el debate. El público, conformado por casi 30 estudiantes, profesionales, investigadores y académicos, planteó preguntas que llevaron a sacar algunas conclusiones.
Así, se consolidó la idea de que los eventos naturales son dinámicos, por lo que la planificación debe ser flexible y estar preparada para responder a catástrofes que se presentarán de forma diferente a aquella de la cual se extrajeron lecciones. Sin embargo, hay que tener cuidado con el lenguaje que se ocupa en la planificación territorial ya que es posible hacer equivaler el concepto de “riesgo” con el de “exclusión del desarrollo”, lo que implica no incorporar las amenazas naturales dentro de las variables a considerar.
La arista económica fue otro de los dilemas sobre los que se hicieron distintas preguntas: ¿Las normas actuales de edificación protegen realmente la vida humana? ¿Debe incorporarse la responsabilidad de las inmobiliarias que edifican en zonas de riesgo? ¿Debe seguir siendo el Estado el que subsidia la recuperación económica y la compensación a las víctimas? Asimismo, es relevante tener en cuenta que la propiedad del suelo es la gran limitante de la planificación urbana ante eventos naturales, especialmente cuando se trata de riberas. La experiencia del Parque Kaukari funcionó porque un solo actor, el Estado, tomó las decisiones sobre él. Entonces, ¿cómo abordar actores e intereses divergentes?
Por último, se consensuó que el conocimiento local sobre los riesgos y amenazas naturales es escaso y fragmentado. En este sentido, CEDEUS tiene una oportunidad y una responsabilidad en liderar el acceso a actores locales, principalmente con investigadores y tomadores de decisión.