Los llamados vehículos mosquito se caracterizan por tener un motor de combustión, un estanque de combustible y una salida de gases adosados al marco de una bicicleta. Ahora están bajo la atenta inspección de las autoridades.

«Estamos preocupados por la proliferación de ciertos vehículos de dos ruedas con motores a combustión que son conocidos como mosquitos. En muchos casos se trata de vehículos hechizos, bicicletas a las que alguien les suma un motor a combustión», señala el ministro de Transporte y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz.

«Queremos que las personas sepan que este tipo de vehículos no está permitido, pues no cuenta con homologación o autorización y porque generan un volumen de contaminantes y ruido que excede nuestras normas», agrega el secretario de Estado.

Las bicimotos no pueden circular, ya que son vehículos motorizados que no consiguen aprobar la homologación ni tienen número de chasis. La idea de las autoridades es divulgar la información y, posteriormente, fiscalizar el uso de estas bicicletas, explican desde el Ministerio.

Respecto de la iniciativa, el investigador principal de CEDEUS, Ricardo Hurtubia, participó en un estudio sobre las mosquito y asegura que «a pesar de ser un motor pequeño emiten muchísimos gases nocivos». Agrega que «en conjunto con el Ministerio medimos varios gases -todavía falta procesar los datos-, pero entre otras cosas que pudimos detectar, la concentración de hidrocarburos y de dióxido de carbono por unidad es 100 veces mayor que los gases emitidos por un auto».